miércoles, 17 de agosto de 2011

“La educación cristiana primitiva y la patrística”

El texto de Abbagnano “La educación cristiana primitiva y la patrística”, nos remonta a los primeros siglos de nuestra era en los pueblos de Grecia y Roma; con el tema principal del surgimiento de esta religión y la conformación de sus bases.
Esta religión  logra superar a las demás, debido a su idea de profesar bajo el ejemplo de llevar a la práctica valores morales para encontrar el reino de Dios, es decir un mundo mejor después de  la muerte, superando a los griegos al combinar religión con filosofía.
El proceso de educación se daba por medio de los evangelios,  los cuales contenían ejemplos, parábolas, comparaciones precisas de comportamientos que inculcaban la formación de las personas después del bautismo. Asimismo, se formaban personas que serían encargadas de profesar la palabra de Dios a más personas y para mayor expansión surgieron los monasterios que permitía una enseñanza en lo intelectual, moral y religioso, además de las escuelas de educación superior de catequesis.
En los primeros años el cristianismo tuvo muchos conflictos con los adversarios paganos y gnósticos, después de dedicaron a la formulación doctrinal y reelaboración doctrinal.
En general, nos permite remontar a los orígenes y a la construcción de los conceptos de bien y mal, así como las estrategias que ha desarrollado el cristianismo para seguir avante y lograr consolidar el sistema actual de enseñanza y de poder.
En el segundo apartado, “San Agustín”, narra la participación filosófica así como su vida de este personaje. Su filosofía se basa en dudar y resolver dudas, iluminar la fe con la razón y la razón con la fe, haciendo hablar al maestro interior, es decir, la Verdad misma que es Dios, es un proceso de formación humana; destacando,  la teoría de la iluminación que explica que todo el conocimiento de verdad nueva no sólo implica determinados signos o palabras que la ocasiona, sino también de una efectiva y directa intervención divina que se realiza en nosotros como iluminación íntima.
Cabe señalar, en el ámbito educativo unas líneas del texto:
“… las nociones viejas se renuevan en quien las enseña  con auténtico empeño, con sincera dedicación.”
“…cuando al enseñar algo logramos despertar en nuestros discípulos interés u admiración, el interés y la admiración vuelven a encenderse también en nosotros y nos sentimos renovados y nos sentimos renovados y descubrimos cosas nuevas.”
“… quien enseña aprende del que aprende…”.

1 comentario:

  1. son buenas sus apresiaciones de la historia espero leer su próxima tarea y como compara la historia con los acontecimientos pedagógicos presentes, saludos

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